La palabra «siesta» viene de la expresión latina hora sexta, que se refiere al momento del día comprendido entre las 12 y las 15 horas, momento en el cual se hacía una pausa de las labores cotidianas para descansar y reponer fuerzas.
La siesta supone un momento de descanso y relajación que permite recuperar fuerzas de cara a la tarde, con lo que aumenta de forma significativa el rendimiento. La costumbre de la siesta diaria mejora la calidad de vida.
¿Conoces sus beneficios?
- Disminuye los niveles de estrés
La siesta aporta relajación. Tomarse un descanso ayuda a reducir las tensiones en el trabajo y te deja renovado, fresco y más concentrado. Además, mejora la sensación de bienestar general.
- Mejora la memoria y el aprendizaje
Una siesta puede proteger el uso excesivo de los circuitos neuronales hasta que el cerebro consolide lo que ha aprendido en un proceso concreto.
- Aumenta la productividad
Tras una siesta te sientes más enérgico y la eficiencia en el trabajo también mejorará mucho. Además, reactiva los reflejos y mejora nuestro grado de atención.
- Motiva el ejercicio
Dormir la siesta provoca mayores ganas de practicar deporte.
- Estimula la creatividad
Tomar una siesta refresca la mente y puede hacer que las buenas ideas lleguen con más facilidad.
- Es buena para el corazón
Hacer la siesta disminuye el riesgo de muerte por enfermedades del corazón. Disminuye el riesgo de accidentes cardio vasculares.
Última modificación: 15/06/2021